La finalidad de la poesía es lograr la empatía entre el escritor y el lector

lunes, 28 de enero de 2019



En noches como estas, cuando la sangre quema, me recuesto en el pavimento caliente, boca arriba y cierro los ojos. La atmósfera pesada, el vaho del estío, me abrazan, abrazan a mi cuerpo que flota mientras la música de la ciudad despierta. Arde vivir, arde sentir, arde respirar. Mi propia existencia me somete, me oprime, el peso del ser. No tengo escondite, no tengo a donde huir de mí. En noche como estas me convierto en letras, en palabras, no tengo otra opción.